13a Copa Salami

Una vez más, se realiza en Hattrick* otra edición de la Copa que es un homenaje a Tony "Salami", quien partió en el 2003, pero permanece en la memoria y en el corazón de quienes le recordamos y apreciamos.

En este oportunidad, gracias a los amigos de Official Seal Generator pudimos realizar un Emblema para la edición 13. Aquí se lo presentamos.
*Hattrick es un Campeonato de Fútbol Virtual.

Comentarios de Hombres

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El Maletín

Aeroparque Jorge Newberry. Un gordo llega a la aduana con un maletín en la mano. El funcionario de la aduana lo saluda con acento porteño.

MARTÍN
Bienvenido a la Argentina, bienvenido a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires… ¿De dónde viene el señor?

EL GORDO
(Con acento de periodista de CNN… es decir, esa especie de acento neutro (miamero) que es el resultado de la mezcla de acentos latinoamericanos, el inglés y el espanglish)
De Venezuela.

MARTÍN
¡Ah! Mirá Che, del país de Chávez… ¿Y que trae el señor en el maletín?

EL GORDO
(Con tranquilidad, como quien da la hora)
Libros.

Martín hace un silencio no planificado, es como si le hubiesen robado la voz. Luego se recupera.

MARTÍN
Disculpe… Me dijo que en el maletín traía…

EL GORDO
Libros.

Martín vuelve a quedar estupefacto.

MARTÍN
Disculpe un minuto.

Martín se voltea y se dirige a uno de sus compañeros de trabajo.

MARCELO
(Habla por teléfono, casi susurrando)
Sí… sí… sí… claro que sí… vos sos la mujer que yo quiero…

MARTÍN
Marcelo vení.

MARCELO
(Tapando el teléfono)
Martín esperá un momento que estoy laburando.

MARTÍN
Marcelo vení.

MARCELO
(Al teléfono)
Esperá un momento.
(A Martín)
Loco, estoy laburando, esperate.

MARTÍN
No Marcelo vení… en el maletín hay libros.

MARCELO
Ah que bueno, en el maletín hay libros, decíle al señor que los lea.

MARTÍN
El señor es venezolano.

MARCELO
¡¿Vos me estás cargando?!

MARTÍN
No. El señor es de Venezuela.

MARCELO
(Al teléfono)
Tengo que colgar, te llamo luego.
(A Martín)
¡¿Vos no me estás cargando?!

MARTÍN
Vení.

Marcelo se acerca.

MARTÍN
¿El señor me dijo que venía de…

EL GORDO
Venezuela.

MARTÍN
¿Y el maletín tiene…

EL GORDO
(Calmado)
Libros.

MARCELO
No loco, esa no existe… Venezolano con libros no existe… Este señor es nacionalizado.

MARTÍN
¿Usted es venezolano por nacionalización o por nacimiento?

EL GORDO
De nacimiento.

MARCELO
Martín esto es histórico… El primer venezolano que lee… acabamos de hacer un descubrimiento… loco esto es el Nobel de Antropología… Decile a la Flor.

MARTÍN
(Volteando hacia el otro lado)
Flor… Flori… Florencia… FLORENCIA…

FLORENCIA
Martín qué quieres, dejá los gritos.

MARTÍN
Vení.

FLORENCIA
¡¿Cómo que vení?!... Estoy laburando, esto está hecho un quilombo, vos dejás el escritorio todo arreglado y cuando llegás al otro día está hecho mierda… ¡¿Y quién es la responsable?! Florencia, por supuesto…No hay nadie que asuma la culpa, la misma mierda de siempre, por allí anda el suegro de Shakira dando declaraciones, y los muertos del 2001 que se jodan, porque el señor de La Rúa se dedica a dar declaraciones ¡¿Porque no las da desde la cárcel?! Donde debería estar por pelotudo e hijo de puta…

MARTÍN
Pará Flor… Vení, que te quiero aquí.

FLORENCIA
¡¿Qué me querés dónde?!... Vos no has entendido que no te voy a dar bola… Te lo explico en griego: NO - TE – VOY - A - DAR - BO – LA… ¿Lo entendiste?... No te voy a dar bola, buscáte a otra Martín, en Administración hay unas muy lindas… Comprendé que fue una noche de lujuria, lujuria rica, muy buen polvo, entretenida, todo muy bien, pero hasta ahí… No más… Ustedes los hombres deberían entender que nosotras no pensamos igual… Yo no voy a tener una relación seria con un tipo porque simplemente es un buen polvo… Si vos querés colocás una pancarta aquí que diga “Martín es un buen polvo” y yo lo refrendo, si quieres le pongo mi firma y doy declaraciones a la prensa…

MARTÍN
Cortála Flor…

FLORENCIA
No, cortála vos… ¡¿Qué crees?! Que yo voy por la vida teniendo relaciones con los tipos con los que me acuesto… Nooo Martín, no es tan fácil, nosotras vamos más allá de estar pendiente de que el amiguito entre y salga, del autito, del relojito nuevo y de que si gana Boca el domingo se alcanza el nirvana… Mirá Martín, yo tengo que estar pendiente de que a Nico le vaya bien en el cole, de que las maestras cumplan con enseñarle, de comprarle las medicinas a mi viejo, de tener que contener a la vieja cada cierto tiempo, porque se divorció del viejo hace 20 años y siguen enamorados pero ella no le quiere dar bola porque dice que no se puede vivir con un hombre que le dedica los domingos al fútbol…Yo no necesito un buen polvo, me hace falta un hombre que cuando me vaya a la mierda me enseñe el camino del regreso, necesito un tipo que no pretenda que se va a responsabilizar del Nico, del Nico me responsabilizo yo, lo que quiero es que lo respete y no venga a joderlo…Nuestra vida Martín, la vida de las mujeres no consiste en estar pendiente de que el amiguito entre y salga, del autito, el relojito y el partido del domingo… No Martín, nuestra vida es compleja, la de ustedes es… como diría… no es banal… tampoco simple… la de ustedes es… eso… minimalista, la vida de los hombres es minimalista: el amiguito que entra y sale, el autito, el relojito nuevo y el partidito del domingo… minimalista… ni el Dalai Lama logra vivir con tan pocas cosas… ¡¿Me entendés?!

MARTÍN
El señor es venezolano.

FLORENCIA
Ah que bueno… (Al Gordo) Bienvenido a la Argentina, muy linda Venezuela, dicen que mucho calor en Maracaivó, pero muy lindo el país… lo vimos por la Copa… Claro ustedes… ehhh… ¡Lo hacen bien de anfitriones!... Al fútbol le falta eso. Que la pase bien en Buenos Aires.

MARTÍN
Este maletín con libros es del señor.

FLORENCIA
Si el maletín tiene libros, el señor es colombiano. De Bogotá seguro.

MARTÍN
No. Es de Venezuela. Vení.

Florencia se acerca un poco turbada por semejante información. Su cerebro no logra procesar este tipo de cosas.

MARTÍN
Señor, el maletín tiene…

EL GORDO
Libros.

FLORENCIA
(Tras un breve shock)
Claro que tiene libros… Libros Contables.

MARCELO
Que boludo somos. A quien se le ocurre pensar que un venezolano puede andar con un maletín de libros… que boludos…

MARTÍN
Señor ¿Qué tipo de libros trae?

EL GORDO
Novelas, cuentos y algunos ensayos.

FLORENCIA
Y me dejé la cámara en la casa… ¿Te acordás Marcelo? La camarita esa de cartón, la que es un cajita amarilla… me quedaban cuatro fotos… que boluda… ahora nadie me va a creer esto…

MARCELO
Martín pedíle que nos muestre los libros, así le cuento a una amiga que trabaja en el Museo de Ciencias.

FLORENCIA
Sí Martín, decíle que lo abra.

MARTÍN
Señor ¿Podría abrir el maletín, por favor?

El Gordo porta la tranquilidad que caracteriza a quien tiene experiencia, a quien ha pasado por la aduana dos, tres, seis veces… El Gordo es un tipo con oficio, y anda con otros tipos que tienen tanto o más oficio que él. El Gordo abre el maletín y quedan al descubierto decenas de fajos de billetes de cincuenta dólares… Los tres funcionarios de la aduana, quedan mudos… sólo Florencia logra romper el silencio.

FLORENCIA
En el fondo debe estar “El Alquimista” de Paulo Coelho… eso es… El Alquimista alquimió todos los libros y los convirtió en billetes, fijate, este fajito de aquí, seguro que es “El Túnel”…

MARTÍN
Soltá eso Flor.
(Al Gordo)
¿Cuánto hay?

EL GORDO
Sesenta mil dólares.

MARTÍN
¿Usted me está cargando?... ¿Usted piensa que yo soy boludo? ¿Le parece que soy boludo? ¿Tengo cara de boludo?...

EL GORDO
Son 790.550 dólares.

FLORENCIA
Con eso puede comprar Buenos Aires… y le damos el Obelisco como regalo, le ponemos un lazo arriba, azul y blanco por supuesto, y se lo puede llevar en barco, sale por La Boca, un poco hacia abajo y luego empieza a subir, bordea la barriguita de Brasil y de allí derechito a Venezuela, lo puede colocar en Isla Margarita, en Caracas, en Maracaivó, en Variquisimeto, en cualquier lado, el Obelisco donde usted lo ponga, lo va a ser quedar bien, tiene prestancia, tiene elegancia, es todo prolijo, eso sí, colóquelo en un lugar donde tenga que ver con la bandera, porque es el monumento a la bandera argentina ¿sabe? Donde está el Obelisco fue donde se izó por primera vez la bandera argentina… pero claro, no íbamos a poner una bandera grandota para que la gente lo recordara, preferimos poner un Obelisco, somos así Gordo, somos especiales, no tan cultos como quisiéramos, pero estamos en eso, viste que no nos creímos que siendo venezolano pudieras cargar libros… ¡¿Qué clase de pelotudo sos que piensas que nos podemos tragar una fantasía como esa?!

Gordo, este es el país de Borges; loco, de Borges, Borges, Jorge Luis Borges… ¿Sabes quién fue Borges?... No por supuesto que no… Mirá Gordo, nos jodió Alfonsín, nos jodió Menem, nos jodió el suegro de Shakira… pero estamos aprendiendo… vamos de a poco, pero estamos aprendiendo.

Un venezolano con libros… Hay que ser creativo, para plantear semejante boludez… Sos pelotudo Gordo, pero sos creativo… Igual que Chávez, muy creativo.

FIN

Guatire, 18 de Agosto de 2007.

700

Ya van más de 700 venezolanos y venezolanas que se han quedado sin empleo en los últimos 3 meses, eran trabajadoras y trabajadores de Radio Caracas Televisión.

Debido a que el canal no puede operar por señal abierta, ha tenido que reducir su nómina drásticamente; se espera que continúe haciéndolo en las próximas semanas.

Este personal no puede ser absorbido por la industria audiovisual venezolana, en primer término porque aquí no hay una industria, en segundo porque lo de la producción nacional independiente es un bluff, y tercero, porque entes del Estado venezolano los discriminan, ya que casi la totalidad de estas personas hicieron uso del derecho a manifestar su opinión (lo cual es un Derecho Humano) en contra de la medida de no otorgarle a RCTV una nueva concesión de señal abierta nacional.

Tenemos entendido, que de alguna forma la llamada "Cajita Feliz" (el plan de retiro que ofrece RCTV, así denominado popularmente por trabajadores de la planta) les permitirá sortear algunos meses, pero igualmente el desarrollo profesional se les detiene.

Por otro lado, quienes portan las franelas, gorras o chaquetas del canal, son agredidos verbalmente en las calles, panaderías, cafés, etc.; quedando obligados a vivir una situación similar a la que sufrieron las trabajadoras y trabajadores del canal estatal Venezolana de Televisión, en especial durante el período 2002-2004, y aun hoy, en ciertos sectores se les sigue agrediendo.

La Educación y El Respeto son dos principios revolucionarios, en Venezuela se carece de ambos.

Desde este blog le deseamos suerte en la busqueda de empleo a toda esta gente que se quedó, como se dice "en la calle".

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Verde

Caminaba de la Av. México a la Libertador
buscaba las escaleras
para bajar al Boulevard Santa Rosa

Desde arriba parecía un descuido
una vez abajo
se tornó una alfombra

El verde surgía de los adoquines
al lado de la Mezquita,
frente al Templo de los Testigos de Jehová,
camino a la Casa del Artista,
estaba regado, expandido

El cemento no lo detuvo
es la naturaleza haciéndose sentir,
todavía hay esperanzas

Dentro de una semana
empiezo a dar clases
por el lugar.

Paolina y los Coros de la Salsa

En estos días ví, un cuuuliiiito en el metro...

El apartamento en el que vivo da al Ávila, pero también al estacionamiento del edificio. Más allá del muro, que separa el estacionamiento de la calle, hay un cuchitril, en el cual, durante una época, tenían el bonche prendido casi todos los días.

Cuando llegaba molido de trabajar y con ganas de dormir, me tenía que calar la fiesta metida en el cuarto porque el sonido llega como si el peo estuviese armado en la sala.

Culo, culito, coño, coñito... así le decimos en Caracas a las mujeres que están muy chéveres.

Afortunadamente, los panitas del cuchitril, suelen poner muy buena Salsa, aunque en ocasiones adquieren visos de ladillosos con lo que se llama Salsa Erótica; pero en líneas generales, batean 300, con el agregado de que cada cierto tiempo tienen un buen grupo en vivo.

Así pasó el 1º de Mayo en la tarde, cuando el que tocaba el timbal se daba con furia. Razón por la cual, me hizo recordar a Paolina, una amiga porteña, del grupo de la escuela de tango (El Amague). Paolina enseña música y le interesan los rítmos afros y en consecuencia los afrolatinos.

La distancia y la buena onda que nos tenemos, ha ocasionado, que cada vez que escucho Salsa me acuerde de Paolina y, lo mismo me sucede con los Tambores.

También se me viene a la memoria que, le quiero comprar unos cedes para que conozca más de la música afro de Venezuela y, que igualmente me propuse grabarle otros cedes como aquel bautizado "Salsa Baires 1" que le obsequié estando en Buenos Aires, y que cierra con el emblemático himno de Roberto Roena y su Apollo Sound "Marejada Feliz".

Hay tetas de tetas, las del culito del metro, eran la perfección hecha tetas.

En Buenos Aires, sentí que por primera vez escuchaba a Guaco. Aunque los vengo oyendo desde mediados de los 70, un día en la ciudad a la que siempre se vuelve, los oí como nunca. Creo que logré apreciar todo el sonido del grupo en su mayor dimensión.

Me quedó la sensación, de que la distancia me había abierto los oídos, no por no apreciarlos antes, que lo he hecho, son parte fundamental de mis gustos musicales, sino porque no me encontraba imbuído en lo que genera su música, es decir, que como ahora no estoy en Buenos Aires, donde el tango se "escucha" en cada calle, me encuentro descubriendo mucho más a Troilo.

Es casi algo budista, verlo con distancia, en este caso escucharlo, permite apreciar cosas que uno como que da por descontado. Las tiene internalizadas, y por cotidianas se nos hacen normales y se van difuminando sutilmente.

Aquí la Salsa está al cruzar la calle. Si uno visita Antímano, conociendo previamente la música de la Dimensión Latina, sus canciones vienen a la mente de inmediato, porque están allí, en el caminar de la gente, en el swing que llevan, en las sonrisas, los juegos de miradas, los saludos, los colores de la ropa, los modismos... esa es una de las grandes virtudes de la Salsa, retratar fielmente el sentir de la gente de a pie. En parte por eso, es un referente obligado de la música urbana latinoamericana.

Así que con lo de Guaco, viajé a Caracas sin boarding pass.

La ví apenas terminé de bajar las escaleras, ella ya estaba en el andén, me atrajo la figura que su cuerpo dibujaba en el aire, esa cosa que tenemos los humanos de ser esculturas vivientes. El metro aun no había llegado, así que me dió tiempo de acercarme... como un metro 63, veinte y tantos años, 26 me aventuré a calcular... unas nalgas que intuí preciosas, envueltas en un jean blanco... morena clara o como diría la canción "Piel Canela"... y unas tetas... que en cubano sería: que tetas caballero... justas, no muy grandes, preciosas, firmes, por aquello de que cuando caminó pude darme cuenta de que el brasier no tenía que hacer gran trabajo... quizá se lo pone por costumbre, por no andar por allí con las tetas como pueblo sin ley o por miedo a que la gravedad las vaya afectando.

Obvio, que en lo que llegó el metro, esperé que decidiera en cual vagón iba a entrar y entré tras ella.

Estaba lleno, así que caminó hacia el fondo y consiguió asiento en el otro lado. Yo me quedé contemplándola desde una lejanía que me permitía disfrutarla en todo su sabor caraqueño. Lo mismo sucedía con tres panitas que se habían quedado mudos cuando la carajita entró. Se miraron como diciendo: pana, mira este culo. Cuando ella se sentó, empezaron los comentarios sobre la chama; y por supuesto, las sonrisas y las risas que se desprenden de los mismos. Eso es: El Coro de la Salsa, el comentario que el grupo hace, la voz del colectivo que se vuelve canción. Y de él, se desprende el relato de la canción, ya que siempre hay un panita que destaca en el fraseo y, van quedando unas estrofas memorables que guian el cuento.

Lo inverso de lo que sucedía en Grecia, en la fiesta dionisíaca, donde los Coreutas cantaban y el Hipócrates respondía con las palabras de Dionisio. Aquí el Cantante lleva la batuta y el Coro lo acompaña en su sentir.

En la voz de Cheo Feliciano, en "Salomé", es así durante unos instantes:

Cheo: Hay que tiempo feliz cuando yo te quise a tí, mi divina Salomé.

Coro: Recuerdo que tuve ayer, amores con Salomé.

Cheo: Pero tanto, tanto, como yo te quise, cosita buena, negrona, mi divina Salomé.

Coro: Recuerdo que tuve ayer, amores con Salomé.

Es un trabajo grupal.

Algo que en el Caribe a través de la Salsa ha quedado muy bien, en Brasil y Argentina en el fútbol, en México se nota en los Mariachis; y esperemos, que en toda latinoamérica también vaya quedando igual de bien, en la gestión pública y en las iniciativas privadas.